How Will I Live Without a Body? es uno de esos álbumes que pasarán bajo el radar de la mayoría, pero que engrandece la figura de Loma.
Loma, el trío originario de Texas compuesto por Emily Cross, Dan Duszynski y Jonathan Meiburg, ha vuelto con su tercer álbum, How Will I Live Without a Body?. Este nuevo trabajo continúa la trayectoria de la banda en el ámbito del indie rock espectral y evocador, destacándose por su mezcla de ambient, free jazz y folk alternativo.
Desde sus primeros días, la música de Loma ha sido conocida por su sonido inmersivo y evocador. En este álbum, la banda mantiene su característica atmósfera inquietante, lograda a través de la voz etérea de Emily Cross y la precisa instrumentación de Duszynski y Meiburg. Este trabajo se siente tanto espacioso como íntimo, creando una sensación de cercanía y misterio.
How Will I Live Without a Body? fue grabado en varios lugares inusuales, incluyendo el taller de un fabricante de ataúdes y una capilla en ruinas en el campo inglés. Estas locaciones únicas aportan una resonancia natural y un ambiente orgánico que se refleja en las texturas sonoras del álbum. Los elementos de campo, como las grabaciones ambientales, se integran perfectamente con los sintetizadores, guitarras y percusiones, ofreciendo una experiencia auditiva rica y detallada.
El álbum abre con "Please, Come In", una pista que comienza de manera sutil pero se desarrolla en una compleja composición de teclados intercalados y voces ascendentes. Este tema establece el tono para el resto del álbum, que oscila entre lo abstracto y lo concreto. "Arrhythmia", por ejemplo, presenta un ritmo hipnótico respaldado por un conjunto de percusión afro-brasileño-alemán, creando una atmósfera pulsante y propulsiva.
Uno de los puntos fuertes del álbum es la interpretación vocal de Cross. En "I Swallowed A Stone", su entrega es firme y emocional, transmitiendo una sensación de inevitabilidad que resuena profundamente. Las letras, escritas en su mayoría por Meiburg, permiten a Cross explorar diferentes estados emocionales con una autenticidad impactante.
La colaboración con Laurie Anderson y su modelo de inteligencia artificial añade una dimensión adicional al álbum. El título, How Will I Live Without a Body?, y varias líneas de las letras provienen de poemas generados por esta IA, infundiendo una sensación de experimentación y modernidad en el trabajo de la banda. Aunque este enfoque puede parecer desconcertante, se integra bien con la visión artística de Loma.
A lo largo del álbum, Loma demuestra una notable capacidad para mantener un equilibrio entre la experimentación sonora y la estructura melódica. Temas como "Unbraiding" y "Pink Sky" muestran cómo la banda puede construir y desmantelar capas sonoras con precisión, creando paisajes sonoros que son tanto envolventes como accesibles.
Sin embargo, no todo es perfecto en How Will I Live Without a Body?. Aunque el álbum presenta momentos de brillantez, su enfoque minimalista y su naturaleza introspectiva pueden resultar demasiado sutiles para algunos oyentes. La falta de peso en ciertos momentos podría hacer que algunas pistas no logren captar la atención del oyente de manera consistente.
A pesar de estas críticas, el álbum ofrece varias piezas destacadas que merecen atención. "How It Starts" y "Broken Doorbell" son ejemplos de la habilidad de Loma para crear composiciones complejas y emocionalmente resonantes. La primera destaca por su construcción lenta y cautivadora, mientras que la segunda impresiona con sus capas sonoras y su desarrollo narrativo.
El álbum concluye con "Affinity" y "Turnaround", dos pistas que encapsulan la esencia del viaje musical de Loma. "Affinity" utiliza arreglos ecoicos que reflejan el contexto de su creación, mientras que "Turnaround" presenta una demostración pura y sin filtros de la habilidad vocal de Cross, cerrando el álbum con una nota de simplicidad y belleza.
How Will I Live Without a Body? es una incorporación sólida al catálogo de Loma, mostrando una evolución en su sonido y una exploración continua de nuevas texturas y emociones. Aunque no alcanza la perfección, el álbum ofrece suficientes momentos de genialidad para consolidar su lugar en la escena. Con una producción cuidada y una ejecución precisa, Loma sigue demostrando que son capaces de crear música que es tanto introspectiva como expansiva.
